¿Eres una persona que viaja mucho por carretera? Pues ya sea de paseo con tu familia o por asuntos de trabajo, créeme que debiste haber notado algo.
En muchos países del mundo, hay avenidas de largo trayecto, con distancias bastante amplias, tanto para camiones, automóviles más livianos y bicicletas, pero es de los primeros que te hablaremos en este post. ¡Acompáñame!
Esa sencilla explicación te la damos, ya que el día de hoy atenderemos a aquellas personas que nos sugirieron redactar un artículo que hiciera referencia a los transportistas autónomos, un empleo que está muy demandado en la actualidad. Pero, ¿en qué se basa todo esto? Pues si has viajado por carretera habrás notado la presencia de camiones que trasladan mercancía y demás.
Claro está que es un trabajo bastante riesgoso, ya que el vehículo que traslada las encomiendas o materiales de cualquier tipo, necesita de todo un experto que lo maneje, que lo respalde detrás del volante. El trabajo de transportista es uno de los más importantes hoy en día, y por ello, centraremos nuestros esfuerzos en brindarte toda la información acerca de los transportistas autónomos. ¡Vamos!
Trabajo de transportista autónomo
Primero que nada, tendremos que explicarte en qué está basado el trabajo de transportista autónomo para que te quede todo mucho más claro, y más si deseas aspirar a que este trabajo empiece a formar parte de tu vida. Toma en cuenta que es un trabajo que requiere de mucha profesionalidad, entrega, responsabilidad y sobre todo cumplir con las leyes de tránsito. ¡Tú puedes!
Un transportista es la clase de persona que se gana la vida de manera profesional transportando mercancías, encomiendas o materiales de cualquier tipo. Lo más usual, dependiendo del tamaño de lo que vaya a trasladar, es que usen camiones o vehículos de carga pesada. Normalmente, el término de transportista suele conocerse también como el de “camionero”.
La mayoría de los transportistas manejan cientos de kilómetros para llegar a su destino desde el punto de partida, pero hay otros que simplemente transportan productos o materias primas de un lado a otro, este, en el caso de trabajar en una empresa. Otros, lo hacen de mercado a mercado, o de domicilio en domicilio para hacerle llegar la mercancía al consumidor o cliente.
Pero, ya va, que esto no termina acá. Dos párrafos más arriba utilizamos el término de “camionero”, y fíjate que este es únicamente empleados para aquellos conductores que manejan camiones grandes, sobre todo los que circulan por autopistas o rutas peligrosas, mientras que el de transportista, engloba también al que realiza mudanzas o encomiendas en vehículos de menor tamaño.
Ya sean camionetas, motocicletas o bicicletas, aunque es más acertado el término de “repartidores”, aunque bueno, es solo nuestro parecer. En este caso, los trabajadores laboran única y especialmente para una empresa en específico, siendo una relación de dependencia en la cual debe cumplir su tarea de hacer entrega a los diferentes clientes que le asignen.
Metiéndonos de lleno con el tema de los transportistas autónomos, permítenos decirte que estos se encuentran siempre es una constante evolución, son más espabilados que otros, puestos que se ven en la obligación de acostumbrarse o cogerle el ritmo a un tipo de trabajo que no conoce las rutinas, ya que los cambios son constantes debido a las regulaciones y normativas.
Anteriormente te comentamos que el ser transportista autónomo requiere de mucha responsabilidad, por lo cual una de las preocupaciones de este tipo de trabajadores es la tributación. Las obligaciones fiscales a las que se ven sometidos, supone para ellos un considerado desembolso importante de dinero que te dará dolores de cabeza con respecto a las meticulosas cuentas que llevarás.
Para el flujo de la caja, lo mejor es elaborar una buena planificación para que selecciones la forma de tributar, de esa manera te resultará mucho más beneficiosa. Con respecto al IRPF, el transportista autónomo escoge entre la estimación objetiva o pago por módulos, así como la estimación directa. Todas las opciones se reflejarán en el IVA, por ambos regímenes, como el simplificado y el general.
Cuánto gana un transportista autónomo
El salario o sueldo de un transportista por cuenta ajena oscila entre los 1.400 y 1.500 euros, al menos en España. Ahora, lo que puede llegar a ganar un transportista de larga distancia puede ser un poco mayor. Esto porque le exige al conductor pasar más días fuera de casa, e incluso trasladarse a otros países y gestionar la entrega de altas cantidades de mercancía.
Todo cambia cuando hablamos de los transportistas autónomos, cuya situación no es para nada alentadora, y con todo y eso, hay muchos que han sabido sobrellevar las adversidades que se les han presentado en el camino. Este tipo de transportistas no gozan ni dependen de un salario estipulado y sus ganancias serán acorde al tipo de acuerdo que consigan con las empresas.
Una de las situaciones que más les genera problemas a los transportistas autónomos es que cada uno debe hacerse cargo de todos y cada uno de los gastos que conlleva el mantener un vehículo, y más aún si es un camión. Eso incluye mantenimiento de todo tipo: neumáticos, posibles arreglos y los gastos de la gasolina en el trayecto.
Tomando en cuenta todo esto, es un poco complicado deducir cuánto gana un transportista autónomo, pero se estima, según estudios especializados en la materia, que estos generan cerca de 3.200 euros al mes si posee una microempresa de transportistas, ahora, si trabaja solo, esa ganancia se vería reducida a la mitad. ¿Piensas ser transportista autónomo? ¡Piénsalo bien!
Requisitos para ser transportista autónomo
A continuación, te hablaremos de los requisitos que debes tomar en cuenta a la hora de convertirte en un transportista autónomo. Primero que nada debes darte de alta en la Agencia Tributaria para registrar así la actividad de transporte, ya sea de mercancía por carretera o mensajería, entre otros. A parte de ello, deberás tener a la mano ciertos documentos.
Al solicitar el alta en Hacienda, deberás acudir a la misma con la documentación en regla del vehículo a usar, original y copia del DNI, y solicitar el alta como autónomo en la Seguridad Social. Claramente, debes hacer mención del automóvil con el que trabajarás, en caso de poseer carga de menos de 2.000 kilos –masa máxima autorizada-, no estarás exento de la tarjeta de transporte, pero sí limitado a la capacidad de carga y volumen.
Hay dos tipos de tarjetas de transporte que te serán entregadas apenas termines de tramitar la documentación. Una de ellas es la MDL o Tarjeta de Transporte Público de Mercancía Ligera, la cual es para vehículos con carga no mayor a 3.500 kg. La otra, es la MDP, que es de carga pesada y es útil para trasladar mercancía que supere los 3.500 kg.
Transportista autónomo Madrid
Una de las ciudades que más demanda de transportistas autónomos tiene, es Madrid, la capital de España. Cada día son más las empresas que solicitan este tipo de servicio a las personas que tomaron la iniciativa de convertirse en trabajadores autónomos para dejar a un lado el trabajo cotidiano.
Si eres de dicha ciudad, no dudes un solo segundo en acudir a alguna entrevista de trabajo como autónomo, quizá tengan un puesto para ti y así puedas trabajar tranquilamente y obtener ganancias mucho más grandes que las conseguidas en tu anterior laburo. ¡Inténtalo!
Transportista autónomo Barcelona
No solo es en Madrid, sino también en Cataluña, específicamente en Barcelona, donde necesitan a muchísimos transportistas autónomos. Claramente, los que más requieren de este servicios son las empresas y compañías de productos que necesiten que dicha mercancía llegue sana y salva a su destino. Barcelona, es uno de las mejores ciudades para esto.
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